Ahora sí que las cosas en la vida política en el distrito 10 para las diputación federal las cosas si que están calientes y vaya que algunos panaderos dicen no leer este espacio, pero otros si que se tomaron en serio en observar las verdaderas necesidades que tienen los grupos políticos, los grupos sociales y sobre todo la gente y el sabor al caldo de la política que ahora sí le pusieron un aroma exquisito del juego electoral y de la democracia.
Para males del grupo que es apoyado por Rafael Moreno Valle y que se han postrado como reyes en su pedestal o en su nicho y que me refiero al extinto grupo que clama triunfos y se dan baños de pureza dentro y fuera del ayuntamiento de San Andrés, se impuso el Tigre de Humberto Aguilar. Que bueno para la mayoría que quiere ver consolidado el trabajo que venía dándose y para aquellos que fueron corridos en esta administración de David Cuautli.
Muy malo para los amiguitos de esta administración cuautlista porque se enfrentaran al grupo político del PAN conservador y que es la mayoría; y aunque toda esa sombra que ha dividido a los grupos panistas en este municipio de San Andrés, el grupo de Omar Coyopol claman, ¡mas vale viejo por conocido que ignorante por conocer! A sabiendas que la rivalidad de un presidente municipal como David Cuautli con el ex edil sanandreseño tendrá que verlo y tratarlo en esta administración por más que no quiera y tendrá un fuero que nadie del municipio podrá soportarlo.
Ahora sí los juegos se acomodan y ahora sí, Juan Pablo Jiménez Concha, aún con su bunker gubernamental, le cambiarán la sonrisa, aún si en campaña en lugar de despensas hubiera sidras o desayunos en el Señorial donde continua invitando a grupos por separados para que no se vean las caras y se pongan a pelear. Cosa que continúa en el PRI, los mismos perros, los mismos gatos y los mismos ratones. Un error que le puede costar la diputación y que servirá de medición para quien quiera la presidencia municipal, porque si hay algo que peca de los suspirantentes de San Andrés es que dicen: “No. Yo voy a sacar a los panuchos, yo tengo la gente, yo les voy a dar trabajo”. “Ja,Ja, Ja”. Ya alguien ya se puso a prometer lo que no ha podido dar pero eso si ya esta pidiendo todo el apoyo. Por cierto, ¿Cómo se le llama a un partido político que solo pide trabajar y no cuenta con instalaciones propias, recursos económicos y le ponen estructuras externas?
Los resultados de una campaña austera, dependen del grado de simpatía del candidato, carisma, factor de negociación y sobre todo de antecedentes políticos de lealtad. Si no se cuenta con esto, existen grupos separados afines, malas negociaciones, disgregación y antipatía personal y sobre todo, falta de apoyo a la revolucionaria e institucional. Pobres. Clara derrota y lo que se llama campaña perdida.
Estamos a muy buen tiempo, pero las encuestas para el día de hoy si fueran las encuestas, Omar Coyopol levantó desde que el CEN del PAN en Puebla, rectifico sus candidatos en el estado. Al PRI estatal le han dado una lección de toma de decisiones y juegos verdaderos que a muchos dejan con el ojo cuadrado y eso se debe a que los estrategas como se definen propiamente no conocen la política de estado, los procesos electorales y mucho menos reconocer que hay mejores que quienes toman las decisiones en una noche de cantina o entre grupos selectos que afectan a miles de poblanos ¿Y si Juan Pablo no fuera el candidato? ¿Usted por quien votaría?
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